Hoy toca hablar de una de las más curiosas que han pasado en los últimos años gracias a internet.
Esta es la historia de un país diminuto, que se llama Tuvalu en mitad del océano pacífico, en la polinesia. Está formado por 4 arrecifes de coral y 5 atolones y su superficie es realmente minúscula: 25 Km2, aproximadamente un cuarto de la ciudad (sí ciudad, no provincia) de Sevilla.
Es el tercer país menos poblado del mundo con 11000 y pico habitantes y es uno de los dos más amenazados por el cambio climático y la posible subida de las aguas, porque su altura máxima es de sólo 5 metros sobre el nivel del mar.
Es el típico país de fotos idílicas, para perderse. Playas de arena blanca y clima paradisíaco. Su historia moderna comienza con la visita de españoles en 1584 y por ahí han pasado casi todos los paises occidentales, hasta que se convirtió en colonia británica en 1915. Se independizó en 1978 con este nombre.
Justo en ese momento se estaba, en la otra punta del mundo arrancando internet. Como sabéis internet, nació como un proyecto militar de los EEUU y se extendió poco a poco a lo que todos conocemos hoy. Una red global. Pero había que regularla y de lo primero que se hizo, era ir asignando los dominios a sus funciones. De esto se encargó la ICANN, una organización de EEUU que simplemente fue asignando a cada país o sector un código que podría ser identificativo de ese país o sector. Así, EEUU era .us, España, .es, Francia, .fr, Portugal, .pt, las compañías globales, .com, etc. Uno a uno fueron asignando los nombres y cuando llegaron a Tuvalu, pues lo normal, .tv.
La normativa del ICANN regulaba que era cada país quien debiera gestionar ese dominio, otorgar los nombres y cobrar por sus derechos. Igualmente los organismos de gestión de internet se encargarían de los dominios genéricos.
Y eso cambió la vida del país. Resulta que tv es el dominio que querrían para ellas todas las televisiones del mundo, pues tv es televisión en casi todos los idiomas. Y Tuvalu comenzó a recibir peticiones del dominio desde todos los lugares del mundo para tener dominios de cientos de televisiones.
Pero como no llueve a gusto de todos, la conservadora población de Tuvalu (mayoritariamente cristiana) tuvo cierta controversia sobre la gestión de este dominio, ya que muchas reservas se han utilizado para televisiones pornográficas por internet. Eso fue un problema en los primeros momentos, pero se decidió cortar por lo sano y “vender” estos derechos y a mirar para otro lado: ingresos frescos y pocos problemas morales. Los derechos los vendieron a la empresa dotTV por 50 millones de dólares. Eso convirtió al dominio de internet al primer producto exportador del pais y en un remanente absolutamente crítico: con ese dinero se han mejorado las infraestructuras del pais, se han hecho carreteras y se ha conseguido, entre otras cosas, costear la entrada en la ONU.
A veces la vida te da un golpe de fortuna y te cambia la vida, como le pasó a Tuvalu a finales de los 70 y hay que saberlo aprovechar.
Ahora, recordad que cada vez que una televisión os publicite un dominio .tv que realmente está haciendo referencia a un pequeño país del Océano Pacífico.
¡Menudo negocio! ¡Y practicamente sin mover un dedo!
Jeje. Me encanta lo de vender los derechos y mirar para otro lado.